El Bosque Atlántico, ó selva Paranaense, es una de las regiones más ricas en cuánto a especies en el mundo, en él se hallan aproximadamente 530 especies de aves, entre ellas podemos citar al pájaro campana (Procnias nudicollis), a la harpía (Harpia harpyja) y al loro vináceo (Amazona vinacea). Entre los mamíferos se destacan los más grandes y espectaculares mamíferos del continente. Entre los felinos encontramos al yaguar (Panthera onca) , al puma (Puma concolor) y al
ocelote (Leopardus pardalis). Otros mamíferos son el
tapir (Tapirus terrestris), tres especies de venados del género Mazama, dos especies de
pecaríes, el coatí (Nasua nasua), el zorro vinagre (Speothos venaticus) y muchas especies de
primates y
armadillos. Entre los reptiles sobresalen la anaconda verde (Eunectes murinus) y el yacaré overo (Caiman latirostris). La ecorregión posee más de 50 especies de anfibios.
Fuente: Wikipedia
Entre su flora podemos destacar la inmensa variedad de árboles,
orquídeas y otros tipos de plantas. Entre las especies botánicas más importantes de esta ecorregión se encuentran: el helecho arborescente o chachí (Alsophyla atrovirens), la yerba mate (Ilex paraguariensis), el
lapacho rosado (Tabebuia heptaphylla), el ibirá pitá (Peltophorum dubium), el
palmito (Euterpe edulis), etc.
La
Reserva Surucuá es un relicto de bosque atlántico que además cumple con las importantes funciones de nexo entre los parques Nacional de Iguazú (Argentina) y Do Iguacu (Brasil), sino que además sirve de zona de amortiguamiento al Parque nacional de Iguazú.
En los dos años que estamos trabajando en la reserva, registramos casi 200
especies de aves, casi 20
especies de mamíferos, casi 30
especies de orquídeas, y muchos registros más entre reptiles, anfibios, plantas y árboles.
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